sábado, 24 de mayo de 2014

Otro bolso de trapillo

Aquí os dejo el segundo bolso de trapillo que hice, para una amiga.

 
Es muy parecido al otro aunque tampoco seguí ningún patrón, hice la base del tamaño que me pareció y luego fui subiendo las paredes hasta que me pareció. Muy profesional todo, ya lo veis, jajaja.
 
¿Os gusta? Mi amiga me dijo que el bolso estaba gustando mucho...
 
Y tengo empezado un bolso para la pitufina, que será como este pero con los colores invertidos, que a ella les gusta mucho el rojo. A ver cuándo puedo retomarlo... 
Lo de retomar el bolso de la pitufina enlaza con las novedades de mi brazo roto. Ayer fui a que hicieran una radiografía y luego tuve visita con el traumatólogo, que lo vio tan bien que decidió sacarme la escayola y que empiece cuanto antes la rehabilitación (por lo menos tendré que hacer veinte sesiones) porque la prioridad es estar al 100% cuando nazca el piratilla (y ya estoy de 33 semanas), porque si no le puedo coger en brazos me dará algo...
Pero esto no va a ser fácil, eh. Todavía me duele mucho y ayer haciendo en casa los ejercicios que me dijo el doctor me caían los lagrimones por las mejillas. Pero por lo menos hoy parece que ya he superado el síndrome de Estocolmo que sentía con mi escayola y ya no la quiero recuperar, me siento menos protegida sin ella y me da miedo recibir un golpe, pero prescindir de la escayola es el primer paso para estar recuperada y aunque me dé pánico la rehabilitación, esta batalla la voy a ganar yo.
 

sábado, 17 de mayo de 2014

Rescatando una camiseta manchada

Me regalaron una camiseta de embarazada e iba a coser en ella la aplicación de Bebé a bordo que os enseñé aquí pero el día que la estrené, sin haber cosido la aplicación, la manché. Y qué mancha. Trayecto de tren de unos 40 minutos, el bolso en mi regazo, se abre no sé cómo una botellita que llevaba dentro, en todo el rato de trayecto tiene tiempo de empapar la piel del bolso -negro- y mancha la camiseta -blanca- dejándola hecha un cristo.
Muchos lavados y un remojo en lejía después quedó así:


Las manchas se fueron bastante pero se seguían viendo y la aplicación no era lo suficientemente grande como para taparlas y, además, hubiera quedado demasiado baja. Pero no voy sobrada de ropa premamá de entretiempo y qué narices, la camiseta estaba nueva, no iba a tirarla. Decidí limonearla con algo, unas cenefas de tela bonita de patchwork, por ejemplo, pero entonces me rompí el brazo y estoy que ya no puedo hacer nada de nada.
¿Nada? Dibujar sí, aunque ir tensando la camiseta con el brazo malo costó lo suyo...
 
Y así quedó la camiseta...


No es la camiseta más chula que he hecho pero tampoco está mal... y lo mejor es que las manchas no se ven: una está en el culete del bebé, otra en la parte de abajo del saco amniótico y otra tapada con la cenefa de corazones.
 
La re-estrené ayer viernes y a lo largo del día me fueron haciendo muchos comentarios positivos sobre la camiseta, así que parece que gustó. De hecho, a una de mis compañeras de trabajo le gustó tanto que solo llegar al despacho se mostró entusiasmada y me hizo unas cuantas fotos.

 
 
Y ahora tengo pendiente enseñaros cómo ha quedado la aplicación de Bebé a bordo en otra camiseta que compré...

sábado, 10 de mayo de 2014

Bolso de trapillo para el día de la madre

Este post ya lo escribo con una sola mano. Hace ya una semana que me rompí el brazo y en el horizonte ya no planean seis semanas para que sane la lesión sino solo cinco. SOLO cinco semanas en las que apenas puedo hacer nada sin ayuda... y de hacer manualidades ni hablamos, que no solo será el tiempo que esté inmovilizada, luego ya veremos si durante la rehabilitación puedo hacer algo o no y luego el piratilla está por ver el tiempo libre que me dejará...
Pero justo antes de romperme la mano me había dado por el trapillo. Os aviso: el trapillo es un vicio, engancha, dejadlo mientras estéis a tiempo...
 
Y bien, habiendo ido a un curso de iniciación en el que nos enseñaron los diferentes puntos y a hacer un cestito redondo, me lié la manta a la cabeza y quise hacer un bolso, para lo que vi tutoriales en YouTube y acabé inventando el patrón...



Este fue mi regalo a mi madre por el día de la madre.
Y como lo de coserle un forro interior con bolsillo era demasiado para mí, preparé un neceser a conjunto (con los colores invertidos) para tener a mano dentro del bolso las cosas pequeñas como las llaves o el móvil.


Aquí tenéis el conjunto completo.


Me encanta. Sé que tiene muchos defectos y que alguien que sepa tejer bien se echaría las manos a la cabeza pero a mí me encanta. El único pero real que tiene es que el trapillo pesa, así que son bolsos que no se pueden cargar demasiado (algo casi imposible en mí...).

sábado, 3 de mayo de 2014

Limoneando con la pitufina (V): casita con materiales reciclados

Mirad qué casa de árbol más chula hemos hecho:


 
A la pitufina le gusta ver Art Attack. Mejor dicho, le ENCANTA ver Art Attack, aunque todas las manualidades que allí salen son demasiado difíciles para ella (incluso diría que muchas son demasiado difíciles para mí).
El otro día vio una casa hecha con cartón y quiso hacer una. Pero nuestra casa es más simple, apta para que la haga una niña de cuatro años, la de Art Attack fue una mera referencia.
 Os dejo el enlace al video de Art Attack que fue el inspirador: http://www.disney.es/disney-junior/art-attack/manualidades/casa-elevada.jsp
(y recordad que las comparaciones son odiosas).
 
Nuestra casa está toda hecha con materiales reciclados.
 
Lo primero fue coger una caja de zapatos y forrarla con papel blanco.

 
 
Después había que decorar la casa, dibujando puertas y ventanas y un techo que más bien parece una noche estrellada.
 
 
Y después pintarla...
 
 
Con dos rollos vacíos de papel de WC hicimos el tronco del árbol, uniéndolos con cinta aislante. Hubiera sido mejor usar un rollo de papel de cocina pero no teníamos ninguno en la bolsa de papel para reciclar. Después, lo pintamos también con pintura de dedos.
 
Por último, con un trozo de cartón de otra caja hicimos el suelo. Casualmente, la pintura de dedos verde se había secado, así que hubo que pintar con rotuladores: queda menos vivo el color pero de esta manera le pudo poner flores al jardín.
 
Y cuando ya estaba todo seco, con cinta aislante enganchamos la casa al tronco del árbol y el tronco al jardín.
 
Por último, el detalle de la escalera, que hice usando dos palos que venían en la caja de zapatos (para mantener la forma de los zapatos) y los palos de algunas de las plumas que había en su mona de Pascua. La escalera quedó muy aparente para la foto pero he de confesar que en el momento de escribir esto ya está rota, así que tendré que hacer una con cuerda o cordel.

Y ya por fin, solo queda JUGAR...


¿Os gusta? Es un juguete que no durará mucho, pero haciéndolo hemos aprendido muchas cosas: a reutilizar materiales, a pegar, a pintar, a construir una casa... y hemos pasado unas cuantas tardes entretenidas.